Amanda Saldivia.-
La Inteligencia Artificial avanza a pasos agigantados. Mientras unos celebran, otros consideran que el perfeccionamiento de esa tecnología impactará aun más en la vida cotidiana y afectará áreas como la generación de contenidos y el derecho de autor.
Además de que la interacción con un robot virtual, por ejemplo, es cada día más parecida a lo que sería una conversación con un amigo, consejero, familia o un hijo, entonces para qué tenerlos.
Las voces de alerta con más notoriedad, se hicieron sentir a partir del 30 de noviembre de 2022, cuando fue lanzado en período experimental lo que se conoce como ChatGPT, un robot virtual que responde preguntas, puede realizar tareas por escrito y conversar con tal fluidez que dejó a más de uno asombrado por la capacidad desarrollada por la empresa OpenAI.
En un trabajo publicado por BBC Mundo, dicen que el ChatGPT puede responder en segundos a la petición de redactar un poema al estilo de determinado autor. Igualmente enseñar al usuario a preparar recetas, redactar trabajos académicos y hasta cartas para buscar trabajo, basadas en el perfil del solicitante.
El artículo recoge la preocupación de algunos, de que ese “programa parece demasiado convincente al imitar el habla de un ser humano y prevén la aparición de problemas”.
Para tener una idea más cercana del impacto que podría traer a la educación o hasta el hecho de poder diferenciar qué obra es de la creatividad humana, el artículo cita que un diseñador de EEUU logró crear en tan solo un fin de semana un libro infantil con textos e ilustraciones con ChatGPT y otro programa de dibujos.
Entre los consultados por la BBC Mundo estuvo la escritora Martha Gabriel, quien recordó que la tecnología puede ser una herramienta, pero también una amenaza para quienes la utilizan sin moral y sin ética, lo que pondría en riesgo al individuo y a toda la humanidad.
Estas reflexiones se multiplican, por el hecho de que hay cuestionamientos sobre el uso de la Inteligencia Artificial para fomentar patrones de conductas, exponer con más intensidad determinado contenido en las redes sociales, lo que puede provocar un sesgo de la realidad e incluso unos van más allá, como es el caso de la suplantación de identidad y la generación de noticias falsas.
Algunos se preguntan, si el hombre en su ingenio no terminará, como lo exponen algunas películas de ciencia ficción, las máquinas al mando de la tierra y los humanos sus esclavos.
@amandasaldivia