Para los educadores activos y jubilados hay suficientes razones para protestar, porque en los últimos años han visto como merman sus ingresos, al punto de que el abono de nómina quincenal que reciben del Ministerio de Educación no alcanza para comprar los alimentos de un día.
Como parte de las acciones en reclamo de salarios justos, se reunieron este miércoles 21 de octubre en la calle Ilustres Próceres con Hurtado Ascanio de Altagracia de Orituco, y con pancartas en mano dejaron constancia de los reclamos laborales, así como también del deterioro de los servicios públicos, los cuales complican aún más la situación que atraviesan.
Entre los testimonios está el expresado por Dinorah Martínez, docente jubilada con 30 años de servicio, quien señaló que “ya el sueldo que tenemos es un sueldo de miseria, de hambre, que no alcanza ni siquiera para subsistir, para comprar un medicamento, para comprar una harina, un cartón de huevos o un kilo de queso, aquí estamos por un reclamo justo de nuestros salario, de nuestra dignidad como seres humanos”.
También Yulitzabeth Zerpa, docente con 13 años de servicio, quien labora en San Francisco de Macaira, contó que la quincena no le alcanza para dos días de pasaje desde Altagracia hasta esa población del municipio Monagas, mucho menos para mantener a sus tres hijos, razón por la cual decidió asistir a la convocatoria del gremios educativo.
Un comentario en «Educadores activos y jubilados exigen salarios justos»