Amanda Saldivia.-
El hallazgo del cuerpo sin vida de Isbelia Hernández, bioanalista y abogado, profesora de la Universidad de Los Andes (ULA), y al lado de ella, en avanzado estado de desnutrición, su esposo, el también docente jubilado de esa casa de estudios superiores, Pedro José Salinas de 83 años de edad, conmueve a los gremios del país, entre ellos a Sinteg, filial de Fetraenseñanza en el estado Guárico.
El profesor Eichler Hernández, delegado sindical de Fetraenseñanza en esta entidad llanera, en declaraciones ofrecidas en la tarde de este martes 25 de enero a este medio digital, expresó que se unen “al duelo que embarga a los educadores por la situación crítica ocurrida en Mérida, donde fueron encontrados una pajera de colegas universitarios jubilados, en grado de desnutrición y su esposa fallecida”.
“Así estamos los profesionales que dieron todo por un mejor país y así el Estado le está devolviendo, les está destruyendo su permanencia tranquila y sana, hoy son estas parejas de Mérida, mañana puede ser cualquiera de nosotros”, agregó el profesor Hernández.
Al referirse a la situación local, exhortó a los docentes a no dejarse intimidar por quienes ejercen función directiva, “primero está el derecho a la vida de ustedes y de su familia, cuenten con mi ayuda en todo lo que se les presente en materia de acoso laboral”.
En medios del estado Mérida, entre ellos el Diario Los Andes, trascendió que el profesor Salinas está recluido en el Instituto Autónomo Hospital Universitario de los Andes (Iahula), al tiempo que circula la trayectoria de este profesional, quien fue docente de Ecología en la Facultad de Ciencias Forestales y Ambientales de la ULA, ingeniero agrónomo egresado de la UCV en el año 1962, investigador y extensionista.
De acuerdo datos aportados por la periodista Yanara Vivas del Diario Los Andes, la situación de esta pareja empeoró ante la “migración de hijos y familiares cercanos”.
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