Amanda Saldivia.-
Entre los maravillosos inventos del hombre está la fotografía. Por años intentaron capturar esos momentos impactantes de la historia y lo lograron tras innumerables pruebas como parte del ingenio de quienes impulsaron la sociedad industrial a finales del siglo XIX.
Apareció la placa de bromuro en 1871, luego la película fotográfica en la primera cámara Kodak en 1888. Después llegó Lumiere con la técnica de color en 1907, siguió el flash, la instantánea en 1948 y a partir de 1990, la era digital.
En nuestro terruño los fotógrafos han sido claves para dejar constancia de nuestra historia. Esa que nos permite tener evidencia de los hechos ocurridos, de cómo eran las familias que habitaron estas tierras y los acontecimientos importantes.
Entre esos fotógrafos está uno que llegó de Calabria, Italia. Según el poeta José Francisco Martínez, en su libro Historia del Beisbol en Altagracia de Orituco, Ángel Federico Pirrongelli era muy estimado y parte de sus registros fotográficos están en esa obra sobre el beisbol.
Por esa razón, incluyó su biografía donde se puede leer que “Altagracia contó con uno de estos auténticos profesionales de la cámara, quien se hizo famoso y supo ganarse el cariño y la estima del conglomerado orituqueño”.
Registró que este talentoso fotógrafo italiano era farmacéutico graduado, además tenía otros oficios, entre ellos relojero, platero, herrero, pintor y tocaba la flauta. Llegó a Venezuela cuando tenía 25 años.
En 1908 se trasladó de Caracas a San José de Guaribe. Allí se casó en 1917 y viajó por parte del oriente del país, para después radicarse en San Francisco de Macaira, siempre con la pasión de fotografiar.
El autor plasmó que para el año 1921 Ángel Federico Pirrongelli se residenció en Altagracia e instaló un taller cerca de la plaza Bolívar. También en San Rafael de Orituco tuvo una botica en 1937.
El 20 de mayo de 1939, a la edad de 72 años, Ángel Federico Pirrongelli falleció producto de un accidente al manipular lo que se conocía como truenos, que era una mezcla de elementos explosivos que utilizaba para lanzar en los pozos del río Orituco, con la intención de pescar, porque ahí abundaban las doradas y coporos.
Sabías palabras nos dejó el poeta José Francisco Martínez al escribir que “los fotógrafos han sido siempre personajes indispensables en la vida de los pueblos”.
Ese fue el micro de la semana, correspondiente a la serie El Poder del Conocimiento, iniciativa de la empresa Promasorca para enriquecer los saberes con historias, anécdotas y curiosidades de esta región orituqueña, de Venezuela y el mundo. Son transmitidos en el programa Tiempo de Cambios por Activa 104.9 FM.
@amandasaldivia