Amanda Saldivia.-
Al llegar primeras lluvias a la zona donde está ubicado el caserío Tuira, parroquia San Rafael de Orituco, se aprecia con mayor notoriedad el deterioro de la vialidad agrícola, la cual tiene aproximadamente seis kilómetros desde la bifurcación en la troncal 11.
Ana Jaramillo envió la fotografía que acompaña esta nota, con la finalidad de visibilizar la situación que atraviesan, pero también para dejar claro que no es el único problema que tiene ese caserío del municipio José Tadeo Monagas, porque a esa realidad hay que sumarle que desde hace más de 10 años no funciona el acueducto rural; además la escuela está deteriorada en la infraestructura y el techo.
“El ambulatorio no está funcionando, necesitamos la red de tuberías para las aguas blancas si se lograra reactivar el acueducto y tenemos un peligro latente, donde una vez funcionó la bomba que surtía de agua al caserío hay dos bombonas de gas cloro, que eso es sumamente peligroso”, acotó Ana Jaramillo al formular la denuncia.
Para Ana Jaramillo la mayor frustración es ver que pasan los años y siguen en el “olvido”, sin ninguna mejora a la calidad de vida.
@amandasaldivia